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sábado, 9 de junio de 2007

Ultratango, Vale Tango y Altertango - Los nuevos caminos del 2 x 4

Ultratango, Vale Tango y Altertango

Una fotografía del panorama actual




Tres lanzamientos marcan el rumbo dispar del tango por estos días, que circula por los bordes del rock, la electrónica o se sumerge en el misterio de la danza.

Con su habitual impronta dance el grupo Ultratango de los hermanos Satragno, sigue experimentando con los sonidos electrónicos y las formas tangueras en Trasnoche ( MDR ) .

Por su lado, Vale Tango el grupo del pianista Andrés Linetsky, editó el trabajo doble
Tango Baile (Epsa) realizado para bailarines de salón y coreógrafos con un sonido de típica.

Y, por último, el grupo Altertango en el CD Tormenta (la producción más interesante de las tres), combina la polenta tanguera con un ambiente trip hop .

Electrónica

Pensando en Astor Piazzolla como la música del futuro los hermanos Leo y Gastón Satragno decidieron encaminar su propuesta a partir de un sonido de Buenos Aires con perfume de tango pero de pulsación electrónica.

En este nuevo disco llamado Trasnoche continúan en ese camino reciclando tangos de autores como Julián Plaza, Julio De Caro, Troilo, Gardel y Le Pera, intercalado con algunas piezas electrónicas de su cosecha y obras de Piazzolla, que les valió el aval de la Fundación Astor Piazzolla.

El grupo con bandoneón, sintetizadores, batería, violín eléctrico y programaciones elabora un sonido que va del pulso del baile más marcado en la milonguera "Nocturna" a la calma chill out en temas como "Vuelvo al Sur" con la voz del propio Leo Satragno; o que puede apoyarse en Raúl Lavié en "Volver", o mostrar el propio color del grupo en el drum n bass "Afterhour", en que el "yeite" tanguero lo aporta el sonido del fuelle, como en la mayoría de estas experiencias.

Es verdad que el resultado del disco es desparejo, pero por momentos aparece ese sonido de una trasnoche porteña misteriosa y bizarra.

Dos para bailar

Después de un proyecto tan ambicioso como el rescate de la obra de un revolucionario del tango como Agustín Bardi, el pianista Andrés Linetsky decidió armar un proyecto más a tono con los tiempos que corren.

Sus habituales giras con su grupo Vale Tango le confirmaron nuevamente la influencia de la danza tango en todo el mundo. Eso terminó por embarcarlo en un CD doble exclusivamente para bailarines.

Su nueva producción se divide en Tango baile salón (para los bailarines de la milonga) y Tango baile escenario (para coreógrafos y profesionales).

En el CD Salón , dividido en tandas de tango, vals y milonga, aparecen clásicos como "Así se baila el tango", "A don Pedro Maffia", "Bajo un cielo de estrellas", "Yuyo verde", "Milonga mía" y hasta un tango electrónico, entre otras.

En el CD Escenario , recrea "La cumparsita", "Canaro en París", "Inspiración", "Milonguetta para Taranta" y otro tango electrónico de Linetzky para poner un toque de lo que vendrá.

El aporte mendocino

Posiblemente, si los integrantes de Portishead hubieran nacido en la Argentina hubieran hecho un tango noise parecido al de Altertango.

En el camino sónico de otros nuevos grupos como Buenos Aires Negro y Romina y los Urbanos, el grupo mendocino se dedica, en el CD Tormenta (MDR), a resignificar el género desde el corrimiento de ciertos límites del género.

En ese viaje sónico encuentra recovecos donde el tango aparece agazapado a punto de saltar sobre su víctima. Cuando se abre la tapa de su tercer disco, aparece la banda en pleno, con una estética dark que adelanta la sonoridad del grupo.

Altertango interfiere tangos clásicos, candombes y valsecitos criollos con poderosas guitarras noise , batería, bajo, programaciones y scratch, para hacer cortes más rockeros o jugar con los beats electrónicos.

El tango aparece con una flexibilidad capaz de soportarlo todo, incluso con una interpretación que puede ir de la irreverencia al clasicismo abordado por la cantante Victoria Di Raimondo, que también juega cómoda en las inflexiones más rockeras.

Los arreglos, con una mirada progresiva y experimental, no desdibujan la melodía y el rezongo del bandoneón. Por el contrario, la banda se alimenta de esa alteración sónica para darle volumen a un repertorio de temas populares como "Cuesta abajo", "Besos brujos", o las versiones trip hop de "Sus ojos cerraron" y "Milonguita", con chelo.

El grupo parece animarse más a los covers que a temas propios y se corre del foco tanguero para mostrar viñetas tan magnéticas como extrañas en la explosiva versión de "Tormenta", de Discépolo; o en el descubrimiento de un tango impensado como "Rock yugular", de Skay Beillinson y el Indio Solari: una buena síntesis de su búsqueda.

Gabriel Plaza
http://www.lanacion.com.ar/entretenimientos/nota.asp?nota_id=915713
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