Dibujo:Martín Eito
León Gieco
- Charla con León Gieco
La niñez de León
"Quiero iniciar diciendo que cuando yo tenía
13, 14 años escuché rock nacional por primera vez.
Comencé a trabajar a los 6, porque había muchos problemas en mi familia, tirantez entre mis viejos. Y decidí ir a trabajar y pagarle las cuentas a mi vieja en la despensa, en la panadería.
Y lo mejor que hice fue comprarme la guitarra con la plata que me gané.
Cuando tenía 13 años, era un gran vendedor de empanadas. Hice de todo. En mi pueblo paraba un tren, y me di cuenta que la gente estaba ansiosa, y pensé que era un buena oportunidad de venderles algo. Empecé entonces con revistas, después comida que hacía mi vieja, bebidas, etc. Siempre vendía todo.
A los 13 era un gran vendedor de empanadas.
En esa época yo conocía en mi pueblo a Los Gatos, el primer grupo de rock que tuvo un gran éxito como lo fue La Balsa. Y también, aparece un grupo en la tele de melenudos "Almendra".
Cuando yo los veo a Litto Nebbia y a Rodolfo García sigo manteniendo la distancia; para mí yo sigo vendiendo empanadas y ellos son tipos muy conocidos y muy famosos que me inspiraron muchísimo, porque el día que yo los ví decidí ser lo que soy: por ellos."
Su padre
"Mi viejo tenía la voz parecida a Alberto Castillo. Cantaba muy bien. Estuvo 2 años en un grupo muy interesante. Cantaban tango y rumba. Tenían un repertorio por noche de 60 canciones empezaban con un ritmo, luego se cambiaban de ropa y cambiaban de repertorio.
Ese corto período que mi viejo cantó fue realmente una gran inspiración. Yo lo observaba desde la primera fila. Me ponía muy nervioso que se equivocara la letra, pero nunca se equivocó: era alcohólico pero no borracho.
Yo a los 7 años me compré mi guitarra y empecé a cantar chacareras, folklore. Mi ídolo era Jorge Cafrune. Me compraba por aquel entonces una revista "Folklore", y aparecía en marzo un especial de Cosquín. Ahí conocí a todos los artistas del estilo.
Yo cantaba en escuelas, reuniones de primavera, etc., y también ayudaba a la profesora de música a llevar el coro. Que era una cosa muy importante porque era un grupo de gente que representaba como el espíritu del pueblo que cantaba. Había un par de madres que ese día se sublevaba y dejaba sus labores y se iba al coro.
Luego armamos el primer grupo, que se llamó "Los Nocheros" (Por esa razón, Los Nocheros me invitan a cantar en su 2º disco, cuando se enteran que yo había tenido un grupo que se llamaba así).
Hasta que apareció, no sé bien como fue la cuestión, un disco de rock en inglés. Y empezamos a meternos en el mundo del rock, y armamos una banda. Seguíamos al mismo tiempo como banda de folklore, y creamos (los mismos) una banda de rock.
Tuvimos un cambio fundamental cuando escuchamos rock en castellano. Total. Abandonamos el repertorio en inglés, fue gracias a La Balsa.
Y ahí empezamos a interpretar todo de Los Gatos, algunas cosas de Almendra y de Manal. Empecé imitando a Litto, tanto fue así, que cuando me tocó el momento de irme a Bs. As., me dije ‘no voy a poder, si estoy imitando a una persona’. Me costó sacarme su voz, fue muy fuerte para mí".
La Composición
"Yo todavía no había compuesto. Se dio en forma inconsciente. Son cosas del destino.
Un día escuché un tema en mi pueblo (en unas bocinas que transmitían la propaganda de los comercios del pueblo y música) un tema que me pareció maravilloso. Pero no se me ocurrió preguntarles que era.
Pasaron los años, 6 o 7, me vengo a Bs. As., y en la Avenida Rivadavia, donde habían muchas disquerías, escucho otra vez la canción. Entro a la disquería, pregunto quien era, y le pido el disco. Me dio un simple. Vuelvo a la pensión donde parábamos, y escucho el disco.
Era una canción de un grupo llamado Bird, que interpretaba una canción de Bob Dylan. Me gustó tanto que al día siguiente, fui a comprar más. El vendedor me dijo: mirá yo no tengo nada de esa banda, pero tengo un disco del autor de la canción. ‘Vendeme cualquier cosa que tenga que ver con esto’.
Y me vende el 1º disco de Bob Dylan.
Lo llevo a la pensión, lo escucho, y me voló la cabeza ese sonido. Una guitarra, una armónica y la voz... Me entusiasmó para componer mis primeras canciones. Y la primera fue "Hombres de hierro", un afano total de Dylan. La letra, como no sabía inglés zafó.
Me acuerdo que me preguntaba donde iba a conseguir una armónica con un atril. Entonces tuve tanta suerte, que mi amigo me presenta a alguien que me regala el atril y la armónica.
Jamás estudié el instrumento, lo uso para acompañarme. Como hace Dylan. Es un instrumento muy serio, yo escuché maravillas con la armónica, pero yo no las sé hacer".
La idea del Umplageed
"Fue por 1972, una idea que surgió. Se llamaba Acusticazo. Ahí tocábamos con David Lebón, Litto Nebbia, Roque Narvaja, Raúl Porcheto. Fue todo un movimiento. Ahí fue donde comencé a componer las canciones que luego se grabaron en el primer disco.
Para mi era nuevo eso de componer. No puedo decir que fuera consciente: fluyó. Tocaba, iban saliendo las cosas por sí solas.
Ahora es mucho más consciente. Viene la compañía discográfica y te dice que grabes. Hay que involucrarse en la composición, que es muy lindo también, pero es algo consciente".
Las temáticas de sus canciones
"En esos primeros años de composición, tenía muchas añoranzas y comparaba mucho el campo con la ciudad. Creo que era una cosa muy idílica, y veía muy problemática a la ciudad frente al campo. Después me dí cuenta que no es tan así. La ciudad tiene sus cosas".
La escena musical en esos años
"El primer encuentro con Charly García fue por una reunión convocada por un productor que quería juntarnos a Sui Generis y a León Gieco. Luego se hicieron recitales en la sala de Luz y Fuerza.
El Fantasma de Canterville fue un tema que Charly compuso para que yo lo tocara, tema que fue incluido en el tercer disco, y que le dio el nombre a ese álbum. Charly tocó los teclados en ese disco. Tocamos un concierto en Bs. As.
Creamos entonces PORSUGIECO, Porcheto, Mestre, Charly y yo. El nombre fue inventado por Charly. Nosotros salíamos a pegar los carteles de los recitales a las calles., con el tacho de engrudo.
Todos tenemos un buen recuerdo de esa época. Hicimos sólo una gira por el país. Llegamos a Bs. As. Y nos pusimos a grabar el disco.
Al poco tiempo comenzó la censura. De un disco con 12 canciones, aprobaban 2. Todos esos temas fueron a parar al 4º disco, que fue grabado en vivo, en el año 1978. Había también una cuestión de autocensura en las discográficas".
"La suerte"
"Yo recuerdo que ‘Sólo le pido a Dios’, no iba a figurar en el disco, fue todo por casualidad.
Dino Saluzzi, bandoneonista, llegó al estudio cuando estaba mezclando los temas de la placa Siete Años. Me dice: "Qué tal, vine a grabar".
Yo le dije que no lo había llamado, pero me empezó a trabajar con la culpa, que no tenía plata, que se yo...
Entonces le digo que tenía un tema que no iba a incluir en el disco, pero que lo toquemos igual que yo se lo iba a hacer pagar igual.
El tipo agarró el bandoneón, le di el tema y empezamos a tocar. Ese ensayo lo grabamos.
Cuando lo vamos a escuchar llega el productor y luego Charly García. Ponemos el tema y les pareció bárbaro. Se combinaron un montón de cosas. Pusimos finalmente el tema en el disco, pero al final.
Cuando lo escuchó el dueño de la discográfica decide ponerlo 1º en el disco. Ese tema terminó siendo grabado en todo el mundo, con más de 60 versiones en un montón de idiomas: sueco, hebreo, francés...
Después me enteré que la llegada ese día de Saluzzi había sido una confusión, quien lo había llamado había sido Litto Nebbia, pero la hija le dijo León Gieco.
Cosas de la suerte, ¿qué será si no?
De Ushuaia a la Quiaca
Fue algo así también. Yo estaba pasando una época en la que no cantaba. La compañía me presionaba, entonces se me ocurrió hacerlo.
Ya había pensado algo ya durante los primeros años de los ’80, en una gira por todo el país que habíamos hecho. Fue organizada en conjunto con los 5º años de los secundarios del interior. Me conocí toda la Argentina, fueron cerca de 700 conciertos. Me empezaron a dar cassettes de artistas del interior. Desde ese momento empecé a jugar con la idea de grabarlos.
Lo llamo a Sixto Palavecino y grabamos 4 o 5 temas (todos de él). Me decían "estás loco, queremos canciones tuyas". Insistimos, que iba era una genialidad. Finalmente se decidió viajar al interior para grabar los temas. Terminamos bancando el disco nosotros.
Lo gracioso es que después de todo fue uno de los discos más vendidos.
Los años 80
No sabía como arrancar. Porque empezó todo nuevo: los peinados, la ropa, la música. Soda Stereo. Mucho Heavy. Y hubo gente que se enganchó mal.
Y gente que íbamos a ver, y nos parecían muy originales, pero para ellos. No era lo nuestro. Era otra música, con letras post militaristas, sin jugarse.
Pero, de todos modos, para nosotros la tecnología no era algo que se contradecía con la etnia, si estaba bien usada. Y habíamos hecho un disco tecnológico. Virus y yo fuimos los primeros que sacamos discos tecnos en Argentina (años 84-85). Y haciendo chacareras.
Gira europea
Fuimos a Alemania invitados por Mercedes Sosa.
Terminamos recorriendo Europa durante 4 años. Así que fue una cosa con la que logré zafar la década del 80.
En los ’90, los grupos de rock se acomodaron un poquito más a lo que yo hacía. Grupos como Los Piojos, Ataque 77, Caballeros de la Quema, etc.
Discografía
La canción "Del mismo barro", de la placa Mensajes del Alma, es una de las letras que más me gustan. Refleja lo que fueron para mi los primeros años en Buenos Aires. Es un relato de las experiencias de esa época.
Lo mejor que pueden hacer es estudiar. Para mi no haber estudiado es un gran problema, un peso que tengo. Además, estudiar es involucrarse en algo positivo, que te aleja de muchas cosas perjudiciales. En mi vida siempre tuve suerte, siempre logré salir adelante, siempre trabajando. Pero me hubiera gustado tener la concentración para poder estudiar, incluso ahora.
-¿Es frustrante ver que la realidad no se modifica con las canciones?
Cuando ves a 30.000 personas cantando todos una canción, pienso que sería triste si no existiera la posibilidad de compartir algo así. A mi me parece que aquí estamos por una identificación, nos gustan las mismas cosas, estamos tratando de solucionar problemas.
Además, la canción sola no va a cambiar nada. Es algo que va acompañando. Un concierto es una gran terapia. Ir 2 o 3 horas a olvidarte de lo cotidiano.
Las canciones no sólo sirven para cambiar las cosas, no cambian las cosas pero sirven para ayudar a esclarecer el camino de la gente, sentirse identificados.
-¿Qué sueño le queda por cumplir?
Aprendí a agradecer la vida. Agradezco cada día. Estoy en un momento en el que con la vida me alcanza.
Tengo proyectos si, de grabar varios discos: con los primeros rockeros de acá, etc.
Me gustaría encarar un disco con esa época del rock que yo escuché, temas que fueron éxitos en el ambiente underground, que nunca fueron grabados, etc.
O hacer una promoción para que autores del interior envíen 2 temas que seleccionaríamos para editar un CD, la idea es hacer discos con nuevos compositores. Una especie de escalera a la fama pero bien.
Yo no los critico a esos programas. Todos buscamos eso alguna vez, que nos escuchen.
Estos pibes ya tienen un aparato armado con canciones, producción.
Si después podés separarte de ese aparato, podrás hacer tu carrera, y si no quedarás en ese aparato hasta que aparezcan los nuevos y te volteen. Yo eso lo respeto. No son mis enemigos. Mis enemigos son los que hicieron pelota este país
Tomado de Ratacruel.galeon.com
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RBerdi
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