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Quinteto Real - Selección de Tangos 01.
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Horacio Salgán observó antes que otros, que el esplendor del tango empezaba a palidecer.
Los locales habían reducido sus presupuestos y los conjuntos a disminuir sus componentes.
Fue drástico y terminó para siempre como conductor de sus propios conjuntos.
Los apremios económicos lo llevaron a trabajar como pianista en la confitería “New Inn”, donde se encuentra con Ciriaco Ortiz y forman un dúo.
Poco después, los dueños de aquel lugar inauguraron “Jamaica”, en Paraguay y San Martín, allí se conoce con el guitarrista Ubaldo De Lío.
El nuevo rubro ensambló a la perfección y despertó la admiración del público, que pronto se tradujo en éxito. Las actuaciones se multiplicaron y grabaron discos.
Nuevamente el azar le dio una mano.
Nuevamente el azar le dio una mano.
Estaban trabajando en el restaurante del Automóvil Club, allí también se presentó otro dúo, el de Enrique Mario Francini con el contrabajista Rafael Ferro.
Un amigo común, el escribano Santiago Landajo, les propone unirse, se prueban de sorpresa y el público los anima a seguir, pero faltaba un instrumento más, el bandoneón.
Ya decididos a formar un quinteto van a la búsqueda de un instrumentista.
En la confitería Richmond era habitual la presencia de Pedro Laurenz, que iba a escucharlos. No tenía orquesta y hacía tiempo no se lo escuchaba.
Lo invitaron a tomar un café y allí le propusieron unirse a ellos. Por primera y única vez observaron quebrarse la habitual seriedad de Laurenz.
Así nació el Quinteto Real, que debutó a comienzos de 1960 en Radio El Mundo con el padrinazgo de Anibal Troilo y presentados por Antonio Carrizo.
Así nació el Quinteto Real, que debutó a comienzos de 1960 en Radio El Mundo con el padrinazgo de Anibal Troilo y presentados por Antonio Carrizo.
Al año siguiente Quicho Díaz reemplaza a Rafael Ferro.
Giras permanentes, varios viajes a Japón y Europa y el ansiado éxito que duró diez años.
En forma paralela, siguió presentándose con De Lío.
Extraído del libro: “Horacio Salgán: La supervivencia de un artista en el tiempo”. Ed. Corregidor, 1992.
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La música como un mecanismo de alta precisión
Por Federico Monjeau
http://www.clarin.com/diario/2005/11/13/espectaculos/c-01211.htm
http://www.clarin.com/diario/2005/11/13/espectaculos/c-01211.htm
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En la historia del tango Horacio Salgán no representa menos una línea renovadora que una perspectiva conservacionista; conservacionista, no en sentido reaccionario sino en el de fijar las reglas del género, y de fijarlas por escrito.
En la historia del tango Horacio Salgán no representa menos una línea renovadora que una perspectiva conservacionista; conservacionista, no en sentido reaccionario sino en el de fijar las reglas del género, y de fijarlas por escrito.
Quien haya tenido oportunidad de ver alguna de sus partituras para piano habrá comprobado el grado de precisión de esa escritura, que llega hasta las mínimas figuraciones y subdivisiones rítmicas.
Además está su libro sobre el tango publicado en 1991, un ejemplar único en un medio dominado por la biografía, la anécdota, la enumeración y la mitología.
El de Salgán es probablemente el primer libro de tango escrito desde una perspectiva técnico-musical.
Suscintamente, se titula "Curso de tango"; su nombre y su portada, sencillas letras blancas sobre fondo azul, conservan el tono modesto de los textos escolares. No es tanto un estudio sobre el género sino más bien sobre un estilo, el suyo propio; un estudio sobre detalles pianísticos, orquestales, rítmicos, en menor medida armónicos; sobre transiciones, enlaces, buenas fusiones instrumentales.
Ese libro es otra demostración del elaborado pensamiento orquestal de Horacio Salgán.
El piano es parte de un conjunto mayor, el motor de una maquinaria más completa, por lo que no debería extrañar que el tantas veces anunciado e invariablemente pospuesto recital de Salgán en piano solo no se haya concretado todavía, a los 89 años del maestro.
Un piano solo no tiene contrapartes, y además es casi obligadamente un piano improvisado, como ha ocurrido en el tango desde Lucio Demare hasta Gustavo Beytelmann. Pero en Salgán todo está detalladamente escrito.
El conservacionismo de Salgán se manifiesta en la escritura y también en la descendencia.
Su hijo mayor, César Salgán, es un notable pianista que permaneció prácticamente en el anonimato hasta los 60 años; esto es, hasta que el padre, que ya había pasado los 80, le cedió el puesto en el Quinteto Real.
Es como si el hijo se hubiese preparado toda una vida para ocupar el lugar dejado por el padre. Sin lugar a la improvisación, la música de Salgán es un mecanismo de alta precisión.
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Quinteto Real - Selección de Tangos 01
Los arreglos de todos los temas
corresponden a Horacio Salgán
Temas
A Fuego Lento.mp3
A la Gran Muñeca.mp3
A Media Luz.mp3
Adiós Muchachos.mp3
Adiós Pampa Mia.mp3
Buenos Aires.mp3
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Caminito.mp3
Canaro En París.mp3
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Corralera.mp3
El Abrojito.mp3
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