Prevención Cardiovascular - XXVI Congreso Nacional de Cardiología - Mendoza - Argentina

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XXVI Congreso
--Nacional de Cardiología,
---Mendoza, Argentina



Con especialistas argentinos y extranjeros,
el encuentro científico abordó un tópico central:
la prevención cardiovascular

Paola Bruno
http://www.losandes.com.ar/nota.asp?nrc=378146&can=51


. El tema estuvo presente en todas las exposiciones con el propósito de que las enfermedades cardíacas dejen de ser la primera causa de morbimortalidad del mundo.

“La prevención cardiovascular debe comenzar a los 10 años”, aseguró Adrián D’Ovidio, presidente del Comité Científico del Congreso.

Cumplir con esta consigna implica hacer modificaciones en el modo de vida, “sobre todo en los chicos, que deben consumir alimentos sin grasas trans (las que están en los alimentos industrializados) y hacer ejercicio físico”, enfatizó.

Para tratar este tema radical y todas las especialidades cardiológicas, la provincia recibió a 40 invitados extranjeros y más de 300 nacionales, que expusieron en Palmares Boreau.

Por medio de 360 ponencias se debatió sobre: insuficiencia cardíaca, ecocardiografía, arritmias, miocardiopatías y emergencias cardiovasculares, entre muchos otros temas.

Además, en el Auditorio Ángel Bustelo, los enfermeros participaron de las doce disertaciones previstas.

El último congreso de estas características organizado en Mendoza por la Federación Argentina de Cardiología (FAC) fue en 2000 y convocó a 2.700 personas.

“Ahora con más de tres mil participantes, con los que debatimos sobre los últimos avances en las distintas áreas cardiológicas”, explicó D’Ovidio.

En el mundo, las enfermedades cardiovasculares representan la primera causa de morbimortalidad, por lo que los especialistas enfatizan en la prevención de estas patologías desde la niñez.

“La prevención cardiovascular debe comenzar a los 10 años y no a los 40.

Los chicos obesos posiblemente tengan problemas cardíacos antes de lo esperado, ya que el consumo de ácidos grasos trans, azúcares y la poca ejercitación del cuerpo atentan contra el corazón”, argumentó el presidente del Comité Científico del Congreso.

Y si bien el grupo etario que debe vigilar los factores de riesgo sigue siendo el formado por personas desde los 40 años, la tendencia indica que los más jóvenes presentan problemas cardíacos como consecuencia del modo de vida, caracterizado por el sedentarismo
y la ingesta de comida rápida.

Por eso , hay que controlar los principales factores de riesgo cardiovascular:
tabaquismo,
colesterol,
inactividad física,
obesidad,
diabetes y
la herencia.

Los niños y adolescentes pueden reducir el riesgo de padecer una enfermedad del corazón controlando estos factores de riesgo.

“No hay otro modo de evitar estas patologías que no sea la prevención desde temprana edad.

Si se empieza a controlar el mayor número posible de factores de riesgo en la niñez, es posible reducir el riesgo de padecer una enfermedad del corazón en la edad adulta”, argumentó.
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